Carta de Víctor Miró Quesada

Hola, Pepe.

Ayer en Vano Oficio, Iván Thays dijo que eras «uno de los más raros escritores de la literatura peruana». No sé si fue una adulación o un piropo o si, de lo contrario, es la suerte de un escritor [como tú] que narra rarezas [léase: singularidades] impares y agudas y se impone sobre cualquier otro escritor ordinario. Hace un rato, justamente, vi que en El Virrey regalaban un librito [un opúsculo —pareciera] llamado «Lo raro es ser un escritor raro», escrito por Mario Bellatin para la Colección Underwood. Aún no lo leo, pero me pareció coincidente.

Hace unos días terminé de leer tu «Horno de reverbero». Qué te puedo decir. Descarto cualquier tipo de análisis constructivo o contrario. Primero porque no soy ningún crítico acreditado [si es que existe ese apelativo sobrehumano y heroico] y, segundo, porque no dejaría de aplaudirte por tus buenos relatos. Prochazka le hizo a tu libro cierta alusión con «Lectura para minutos». [Dicho sea de paso: su exposición me pareció magistral. El pata es un genio]. A mí, más bien, «Horno de reverbero» me hizo recordar a ciertas líneas de los «Pensamientos» de Pascal. O también a las profundas y bellas reflexiones que aparecen en el Diario de Pavese. O a los microrelatos de Juan José Arreola. O a los cuentos de Christina Peri Rossi. En fin… Pasaré a enumerarte los relatos que más me tocaron [en orden de aparición en tu libro]: Hesitación / Seudología / Fragmentum [bueno—: «la nada es una mirada turbulenta en el fondo de un tubo de ensayo»… / Pesquis / Ombría [«Los sueños terminan donde no deben acabar… se hace añicos el espejo a imagen y semejanza de las estrellas…»] … / Intersticio [uno de los que más me gustó—: «Mis manos se buscan entre sí y me contienen… Hueles a jabón y continúo huyendo de tu ira…» / Destez [la primera línea me parece genial] / Miente / Ordalía [«Dios está en huelga»] / Decantación [las primeras dos líneas son excelentes] / Acedia [fue uno de los que más me gustó] / Telesma [«Él, que no se había sentido norte para nadie, no admitió que le siguieran»] / Anafrodisia [me atrajo mucho] / Contubernio [inmejorable] / Ataraxia [«No hay luz ni papel ni tiempo, pero el mensaje está»… excelente… o «Saber que sabes es realmente entender que descubres] / Catábasis [perfecto] / Hipóstasis [la primera línea] / Ouroboros [inusitado… muy bueno… sobre todo la primera frase] / Excerpta [para mí se lleva el premio # 1] / Compost [las primeras siete líneas] / Huerco / Ascesis…

Y ya me quedo ahí. Me cansé. Te dejo otras frases que subrayé con un gusto tremendo: «un burro muerto con un habano en el hocico»… «su silencio de muerte, su silencio ritual»…«segundos antes de que la palabra de Dios no se oyera y se lanzara contra el piso»… «las voces no llegan ni me buscan»… «quedaba tan sólo absorber la sombra de un cuerpo vacío»… «el miedo a la belleza es, en el fondo, el anhelo de hundirse en la nada»… «el universo de Internet (laberíntica biblioteca prevista, con distancia del caso, por Borges)»… «Docenas de murciélagos brotan de su vientre hasta dejarla vacuamente desnuda».

¡Te felicito! Y, como dices en Catástasis—: «… la lección es contar bien cualquier historia y no preocuparse en buscar una buena historia».

Gracias por recuperar tanta palabra en desuso.



Víctor